Las remesas enviadas al Perú sumaron 1.387 millones de dólares en 2006, 2.131 millones en 2007 y 2.437 millones en 2008. Este último monto, como se puede apreciar, significó un crecimiento de 14,4 por ciento con relación al año anterior.
El BCR señaló, asimismo, que en el segundo trimestre de 2009 las remesas enviadas al Perú fueron de 564 millones de dólares, monto que representó 5,2 por ciento de crecimiento respecto al primer trimestre, lo cual se consideró una cifra importante en el contexto de la crisis económica mundial.
Aunque aún no se tienen cifras oficiales del monto total de remesas durante 2009, algunos analistas estimaron que éste puede haber disminuido como efecto de la recesión que desde septiembre de 2008 remeció a la economía mundial, principalmente a Estados Unidos y Europa.
Los peruanos en Japón -que son entre 70,000 u 80,000- remesan una mayor cantidad de dinero por emigrante. Pero en términos absolutos, en conjunto, la mayor cantidad de remesas procede de Estados Unidos: aproximadamente 1.000 millones de dólares, dijo el investigador de la Universidad Católica, Teófilo Altamirano, uno de los pocos especialistas locales en el tema.
Los países de la Unión Europea de donde se remesan mayores sumas de dinero son España, en la que residen 130.000 peruanos, e Italia, con 90.000 peruanos aproximadamente.
Según cifras del BCR, en los últimos 18 años (hasta 2008) las remesas que ingresaron al Perú ascendieron a 14.044 millones de dólares. El 47 por ciento provino de las economías de la región Asia-Pacífico, y el 53 por ciento restante de Europa y países sudamericanos.
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) registró que muchos hogares peruanos receptores de remesas accedieron -gracias a éstas- a la propiedad y a los servicios de telefonía e Internet, mejoraron sus servicios básicos, y elevaron sus niveles de consumo y educación.
Sin embargo, por lo menos el 50 por ciento de los tres millones de peruanos que radican en otros países está en condición de ilegalidad y es víctima constante de la discriminación, el desempleo y los problemas penales por lo que suele buscar asistencia en los consulados de Perú.
Así lo destaca un estudio de la Defensoría del Pueblo titulado “Migraciones y derechos humanos. Supervisión de políticas de protección de los derechos de los peruanos migrantes”, realizado entre marzo de 2008 y febrero de 2009 en 17 ciudades del extranjero.
Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el continente con mayor cantidad de peruanos migrantes es Norteamérica, que alberga al 67 por ciento de ellos, seguido por Europa con 28,3 por ciento, Asia con 4 por ciento y finalmente Oceanía y Africa con 0,7 por ciento.
Los 10 países de destino con el mayor número de peruanos son Estados Unidos, España, Italia, Japón, Argentina, Chile, Venezuela, Bolivia, Brasil y Ecuador. Estados Unidos registra el 30,6 por ciento del total de peruanos que radica fuera del país.
La OIM también señala que una de las características más saltantes de la población migrante peruana es su composición femenina y juvenil adulta (entre los 20 y 39 años de edad), proveniente de los sectores de ingresos medio y medio bajo.
El incremento de la migración femenina en el Perú se genera a partir de la década de los 90, ya que del total de peruanos que emigraron se registró que el 53,3 por ciento estaba integrado por mujeres, muchas de ellas expuestas a diferentes formas de explotación por cuentiones de género.
Según la Defensoría del Pueblo del Perú, que abrió un debate sobre el tema en noviembre último, las principales demandas de los peruanos en el exterior están relacionadas con la necesidad de obtener orientación legal y ayuda en situaciones de extrema necesidad.
Consideró importante fortalecer los programas con que cuentan actualmente las oficinas consulares peruanas, con el fin de que acopien mayores recursos humanos y económicos que permitan atender convenientemente a las comunidades peruanas en el exterior.
También exhortó al Estado a aceptar la competencia del Comité de protección de los derechos de los trabajadores migratorios y sus familiares, y establecer de una política migratoria inclusiva e integral, inserta en el enfoque de derechos y acorde con los principios democráticos.
Al referirse al tema, el parlamentario andino Wilbert Bendezú acusó de ingratitud al Congreso que no ha aprobado ninguna ley a favor de los migrantes peruanos -que atraviesan momentos difíciles en el exterior-, a pesar de que son parte importante de la economía nacional. (Xinhua)
08/01/2010
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